La estella de los Miami Dolphins Tyreek Hill en duelo de su equipo ante Jacksonville Jaguars, en Miami, el 8 de setiembre de 2024.
Megan Briggs
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La violenta detención durante un control de tránsito en Miami de la estrella de la NFL Tyreek Hill y la difusión de un video del incidente provocaron una nueva polémica en Estados Unidos sobre el papel de la policía, a la hora de interactuar con civiles afrodescendientes.
“¿Qué habría pasado si yo no fuera Tyreek Hill?”, se preguntó el receptor de los Miami Dolphins, en un contexto de reiterados episodios de violencia policial contra los afroamericanos, un problema que tuvo uno de sus puntos más álgidos en 2020 con la muerte de George Floyd, desencadenando una enorme ola de protestas.
El lunes por la noche, Los Dolphins lamentaron lo que calificaron de incidente “exasperante y desgarrador” y uno de los agentes implicados fue dado de baja administrativa a la espera de una administración interna.
Por su parte, un sindicato policial consideró que el jugador “no había cooperado inmediatamente” durante el control, lo que justificó que fuera esposado.
El incidente se produjo durante un control de tráfico cuando Hill se dirigía al Hard Rock Stadium para disputar su primer partido de la temporada contra los Jacksonville Jaguars, también floridanos.
Según la grabación del incidente, realizada por las cámaras usadas por los agentes y difundido por la policía de Miami “en aras de la transparencia”, la tensión aumenta cuando el jugador sube la ventanilla. El policía le pide varias veces que lo baje y lo amenaza con sacarlo de su lujoso auto deportivo.
Inmediatamente después, el jugador es sacado del auto por varios agentes, tirado en el suelo y esposado, mientras uno de los agentes le sujeta la mano con la rodilla en la zona lumbar.
Hill, que estaba con otros dos jugadores al momento de la detención, fue liberado rápidamente después de ser sancionado con multas de tránsito y pudo contribuir a la victoria de su equipo por 20-17 con un ‘touchdown’ que celebró haciendo con sus manos como si estuviera esposado.
Para los Dolphins la situación fue “un recordatorio de que no todos los incidentes como éste terminan tan pacíficamente”.
“¿Qué hubiera pasado si yo no fuera Tyreek Hill?, es una interrogante que tendrá un impacto rotundo”, añadió el club.
