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El equipo estadounidense tomó una ventaja de 10-6 frente al europeo en la Solheim Cup de golf, la versión femenina de la Ryder Cup, después de que se repartieran triunfos en los ocho enfrentamientos del sábado.
El combinado europeo, defensor del título, necesitará así de una remontada récord en la última jornada del domingo en Gainesville (Virginia, Estados Unidos).
Para hacerse con el trofeo por cuarta vez consecutiva, las visitantes tendrán que ganar al menos ocho de los 12 duelos individuales del domingo, una reacción sólo vista en el último día de la Solheim Cup de 2015, cuando Estados Unidos también levantó un 10-6 en contra.
“Necesitamos un día enorme mañana. Necesitamos volver a batir otro récord en la serie de individuales”, declaró la capitana europea, Suzann Pettersen. “Sería un milagro, pero ya lo hemos visto antes”
“Seguro que tenemos posibilidades”, subrayó la española Carlota Ciganda. “Tenemos 12 puntos (por delante)… Podemos ganarlos todos. Eso es lo que vamos a intentar. Que cada una se centre en su partido”.
“Ninguna ventaja es segura en una Solheim Cup”, reconoció Stacy Lewis, la capitana del equipo de Estados Unidos que persigue su primer triunfo desde 2017.
En su séptima participación en la Solheim Cup, la española Ciganda firmó un triunfo y una derrota junto a la danesa Emily Pedersen en la segunda jornada del sábado en el Robert Trent Jones Golf Club.
Ciganda y Pedersen cayeron en la mañana ante Nelly Korda, la número uno mundial, y Allisen Corpuz por un golpe en ‘foursome’ y vencieron en la tarde a Ally Ewing y Lexi Thompson por 2-1 en ‘fourball’.
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